Mucho para decir, poco para hacer: lo que el debate dejó en evidencia

Anoche, en el Teatro Urbano Girardi, los vecinos pudieron observar algo que, aunque preocupante, resultó casi cómico: muchos candidatos a concejales no parecen saber para qué los están votando. Sí, se mezclan municipio, provincia y Nación como si fueran lo mismo, y en medio de ese laberinto, algunos lanzan propuestas como si fueran magos capaces de cambiar la ciudad con un decreto que ni siquiera podrían firmar.

No es que los discursos estuvieran vacíos de ideas: algunos ofrecieron planes de trabajo, educación, seguridad, reforestación, transporte, salarios imposibles y hasta justicia social para todos. Pero la coherencia entre el cargo que aspiran a ocupar y lo que proponen fue casi inexistente. Se nota que algunos creen que un concejal puede gobernar como un intendente, legislar como un ministro o administrar programas nacionales. Esa confusión, intencional o no, deja un mensaje claro: muchos no entienden su rol, otros lo usan para hablar de todo menos de lo que realmente pueden hacer.

Los concejales oficialistas, en cambio, aprovecharon para mostrar los logros de la gestión y posicionarse como quienes garantizarán la continuidad. Eso tiene sentido: un concejal puede acompañar y fortalecer políticas municipales. Pero fuera de ese bloque, las propuestas de los demás parecían más un catálogo de deseos que un plan realista. Y lo más llamativo es la desintonía entre los partidos que representan y lo que plantean: discursos que no coinciden con la ideología declarada, como si cada intervención se hubiera escrito en un taller de creatividad, sin revisar la letra chica del cargo ni los límites legales.

En resumen: mucha palabra, pocas certezas. Los vecinos escucharon promesas grandilocuentes, discursos aspiracionales y soluciones mágicas a problemas que requieren conocimientos concretos y decisiones legislativas precisas. Lo que quedó claro es que, en la Capital, la política local necesita candidatos que sepan qué pueden hacer y cómo, no solo qué les gustaría hacer.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *